La escritora y comunicadora feminista, Coral Herrera Gómez, visitó el LAAAB y nos hizo reflexionar con una cantidad datos y propuestas para acercarnos a la salud y la felicidad en la píldora Cuidados, participación y salud mental: claves y propuestas para el buen vivir que impartió la tarde del 14 de marzo en formato mixto (presencial y online). ¡Con motivo y fundamento habla de la revolución amorosa!
Con vivencias personales, situaciones cotidianas y ejemplos clarificadores, Coral abrió el ciclo Salud, Participación e Igualdad manteniendo, desde el feminismo, que la felicidad y, por lo tanto, la salud mental y emocional son asuntos políticos, colectivos, no exclusivamente individuales. Y desde la apuesta firme por la posibilidad de cambiar la forma de relacionarnos para poder transformar también la forma de organizarnos a nivel político, económico y social.
Repasó preguntas que parecen sencillas y que son la base para otras formas de cuidado y salud: ¿qué nos hace sufrir? Aportó datos impactantes como que somos el país de la Unión Europea que más ansiolíticos, sedantes e hipnóticos consume, a pesar de nuestro buen tiempo y sol. Y cómo, en esas estadísticas, las mujeres doblan a los hombres en el consumo de psicofármacos y son más proclives a diagnósticos de ansiedad, insomnio o depresión. Sin embargo, 2 de cada 3 suicidios los protagonizan hombres (y se suicidan de media 11 personas por día en España).
¿Qué necesitamos para estar bien? Coral nos invitó a hacernos y contestarnos esa pregunta para poder iniciar el camino de la autocrítica amorosa. Tomando como base la filosofía del buen vivir o Sumak Kawsay, recuperó cómo la felicidad, por más que nos la quieran vender como un resultado de la actitud y esfuerzo personal, es una meta colectiva porque nadie podemos estar bien y sanas rodeadas de otras personas en sufrimiento: somos seres interdependientes y nos necesitamos, nuestra felicidad también depende de nuestras relaciones.
Con la determinación de que otras formas de quererse son posibles y con la capacidad y responsabilidad propia, nos aportó muchas claves de trabajo para tener una buena vida. Como dijo elocuentemente: “hay que trabajarse el patriarcado y el capitalismo que anidan en cada una de nosotras”. En concreto, señaló que el desafío para los hombres es, entre otras cosas, atender los cuidados: el auto-cuidado, el cuidado de las demás personas y acometer tareas de cuidados.
Para las mujeres, Coral señaló que el patriarcado declaró la guerra a las mujeres, entre las mujeres e internamente contra cada una de nosotras. Puso sobre la mesa la necesidad de recuperar la confianza en nosotras mismas y usar el poder que tenemos. Dejar de ser las que menos hablamos, con la voz más baja, con prisa y como pidiendo permiso para empezar a hablar con voz propia, audible, firme en sus posiciones, con los tiempos y el respeto necesarios.
Con la esperanza de que “todo se puede trabajar”, Coral pasó a aportar claves que poner en marcha para cuidar nuestras relaciones y para trabajarnos los patriarcados en comunidad: desobedecer la división sexual del trabajo, basarnos en los buenos tratos y el cuidado mutuo, generar espacios de crítica constructiva libres de obediencia, buscar otras formas de enfado y desacuerdo que no generen violencia.
Si quieres escuchar con más detenimiento el “Decálogo de cuidados en las organizaciones” no dejes de ver el vídeo-crónica de la píldora del LAAAB, que aprenderás mucho más sobre “buenos tratos, todo el rato”, la autodefensa emocional, aprender a decir que no, abrazar la diversidad o la importancia de atender las bienvenidas, las despedidas y las celebraciones.
Ya fuera de tiempo, con todo el mundo tomando notas y capturas de pantalla, Coral nos regaló un “Decálogo para el autocuidado” de más de 25 puntos. Nos invitó a hacer y firmar nuestros propios pactos de autocuidado y a buscar amores compañeros para construir colectivamente el buen vivir, concluyendo que el autoamor es una revolución política en la que todas las personas estamos invitadas a participar.
Un auténtico torbellino de datos, claves, situaciones íntimas y realidades colectivas abordadas con humor, amor y sinceridad: desde la autocrítica amorosa a la revolución de los cuidados. ¡Gracias Coral!.
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